Antes de comenzar las explicaciones, debemos dejar claro que la conservación de los huevos no es tanto un tema de frío de nevera, calor extremo o temperatura ambiente, sino de mantener una estabilidad en la temperatura.
Entonces, si usted compra un cartón de huevos en el supermercado y lo consigue almacenado a temperatura ambiente, no se aflija en llegar a casa y refrigerarlos en la nevera. Los puede conservar en una zona de la cocina donde no le pegue directamente la luz del sol. ¿Por qué? Porque el cambio de temperatura provoca la condensación de agua en su superficie, es decir, en la cáscara del huevo, y eso humedece el cartón, aumentando las posibilidades de contaminar la proteína.
Si, en cambio, los consiguió en una nevera, llegue a casa y consérvelos de la misma forma, en la que pueden permanecer hasta cuatro semanas en buen estado. Pero, tome en cuenta que debe sacarlos del refrigerador justo antes de consumirlos.
Ahora que ya sabes esta información, suponemos que la próxima vez que llegues con tu cartón de huevos a casa elegirás la opción que más te funcione.
Todos estos datos los tenemos muy claros y los aplicamos en el Grupo JHS, que tiene 10 años sirviéndole a Venezuela a través de nuestros productos avícolas, y ahora enseñándole esto y más a nuestros alumnos del Instituto Universitario de Tecnología Agroindustrial.